La mayoría de los alojamientos logísticos de tropa presentan problemas habitacionales

A la última solicitud de información sobre la Base General Menacho (Bótoa – Badajoz) se unen nuevas preguntas relativas a las Bases de El Goloso (Madrid) y Jaime I (Bétera -Valencia)

Leganés, 20 mayo de 2020

A la última pregunta remitida por la Asociación de Tropa y Marinería Española “ATME” al Ministerio de Defensa, fechada el 7 de mayo, relativa a las quejas que se estaban recibiendo sobre los continuos cortes del suministro de agua, agua caliente y calefacción en la Base General Menacho en Bótoa (Badajoz), se han sumado las referidas a las bases El Goloso (Madrid) y Jaime I en Bétera (Valencia),

Mientras, en la primera, se están produciendo falta de espacio para poder alojar al personal que se acaba de incorporar a sus unidades, teniendo que ser alojados en la zona de transeúntes y en el gimnasio, en la segunda, desde el año 2018, se están produciendo problemas de legionelosis en uno de sus edificios de alojamiento logístico de tropa, lo que obliga a no poder utilizar la instalación de agua en diversos periodos de tiempo.

Los problemas habitacionales en las diferentes bases y acuartelamientos de las Fuerzas Armadas, muy especialmente en sus zonas de vida, no son algo nuevo. A unas instalaciones la mayoría de las veces arcaicas, con instalaciones eléctricas y de agua obsoletas, que no pueden soportar la potencia que les exige una ocupación completa de sus camaretas, ocupadas por 3 y 4 usuarios, se une un mantenimiento deficiente ocasionado por la contratación de empresas donde prima la economía a la calidad en el servicio, lo que obliga a grandes esperas para poder realizar reparaciones y operarios, muchas veces, poco experimentados.

Después de una crisis económica que supuso un drástico descenso de los presupuestos dedicados al mantenimiento de las bases y acuartelamientos, la actual crisis, provocada por la pandemia del COVID-19, va a suponer, previsiblemente, acabar con las medidas que se estaban tomando para su mejora.

Los usuarios deben ser conscientes, como la Asociación aconseja, que una de las primeras medidas que debe tomar es utilizar el procedimiento de quejas, regulado en el Real Decreto 176/2014, con objeto de dar a conocer estas deficiencias, por conducto reglamentario, a los mandos de personal de los ejércitos correspondientes. De otra manera, cuando ATME reclama soluciones a estos problemas, se le responde que no son conocedores de estas deficiencias.